
Verín combina historia, paisajes termales y un carnaval único. Con castillos, vinos del Támega y aguas medicinales, esta villa ofrece cultura, naturaleza y tradición en cada rincón.
Por qué visitar Verín
Verín es mucho más que una villa del sur de Ourense. Es una tierra de contrastes, donde se cruzan la historia, la cultura popular y la naturaleza. Su entorno, a orillas del río Támega y muy cerca de la frontera portuguesa, ha marcado su carácter abierto y hospitalario.
El viajero encontrará aquí castillos imponentes, balnearios con aguas termales y una tradición festiva como pocas: el Entroido, declarado Fiesta de Interés Turístico Nacional. Todo ello en una tierra de buenos vinos, viñedos en terrazas y cocina tradicional.
Además, Verín es un excelente punto de partida para conocer la comarca de Monterrei y recorrer sus rutas entre pazos, ríos y pueblos con encanto. Es ideal para quienes buscan una experiencia gallega auténtica, sin prisas, con raíces profundas y mucha vida cultural.
Las 3 paradas que no puedes dejar de hacer si visitas Verín

Castillo de Monterrei
Una de las fortalezas mejor conservadas de Galicia. Desde su torre, las vistas del valle del Támega son espectaculares. Alberga un antiguo hospital de peregrinos.

Balneario de Cabreiroá
Famoso por sus aguas mineromedicinales, este espacio ofrece relajación, salud y un entorno natural perfecto para el descanso.

Centro histórico de Verín
Pasear por sus calles es descubrir iglesias, plazas y casas nobles. No te pierdas la plaza García Barbón ni la iglesia de Santa María la Mayor.
Descubre todo sobre Verín
Historia
La historia de Verín se remonta a la Edad Media, aunque sus tierras ya estuvieron habitadas en tiempos prerromanos. Fue lugar estratégico en la frontera con Portugal y formó parte del Condado de Monterrei, una de las zonas más influyentes de Galicia en la época bajomedieval.
El castillo de Monterrei tuvo un papel defensivo clave en los conflictos con Portugal y más tarde fue también refugio de peregrinos que seguían el Camino de Santiago. En la Edad Moderna, Verín creció como centro comercial y agrícola, beneficiándose de sus ricas tierras y sus aguas termales.
Durante el siglo XX, la villa se modernizó, manteniendo su tradición vitivinícola y su importancia como punto de paso. Hoy, es una localidad que equilibra modernidad y tradición, y que ha sabido conservar su herencia con orgullo.
Leyendas
Una de las leyendas más populares de Verín habla del castillo de Monterrei, donde dicen que por las noches puede escucharse el lamento de una dama que espera a su amante perdido en batalla.
Otra historia curiosa gira en torno a las aguas de Cabreiroá, que según la tradición local, fueron bendecidas por un santo eremita. Desde entonces, se cree que curan no solo el cuerpo, sino también el alma.
Durante el Entroido, las máscaras y ritos hacen referencia a antiguos cultos paganos. Los cigarróns, personajes del carnaval, protegen la memoria ancestral del pueblo con sus trajes, sus campanas y su energía arrolladora.
Gastronomía
En Verín se come bien y con fundamento. Su cocina combina la contundencia de la montaña con la suavidad del valle. Destacan platos como el cabrito al horno, el pulpo á feira y el tradicional caldo gallego.
El protagonismo lo tienen los vinos con Denominación de Origen Monterrei: blancos frescos y tintos con cuerpo, ideales para acompañar carnes y embutidos caseros. La empanada de zorza, los freixós y las orellas de Entroido completan una oferta gastronómica con mucho sabor y tradición.
Los bares y restaurantes del centro ofrecen menús caseros con producto local y hospitalidad genuina. Comer en Verín es una parte esencial de la experiencia.
Qué ver cerca de Verín

Allariz
A menos de una hora, este precioso pueblo combina arquitectura medieval, tiendas de artesanía y un entorno fluvial perfecto para pasear.

Chaves (Portugal)
A solo 30 minutos. Ciudad termal portuguesa con castillo, puente romano y gastronomía irresistible. Una excursión internacional sin salir del valle.

Xinzo de Limia
Conocida por su propio Entroido y por su cercanía a la Laguna de Antela. Ideal para explorar otra faceta festiva y natural de Ourense.











