Pontenova
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Pontenova

A Pontenova combina naturaleza, historia industrial y paisajes únicos. Un rincón ideal para caminar por antiguas vías mineras y perderse entre bosques gallegos.

Por qué visitar Pontenova

A Pontenova es uno de los secretos mejor guardados de la Mariña lucense. Este municipio sorprende por su fusión de patrimonio industrial, naturaleza exuberante y tradición. Las antiguas minas de hierro han dejado una huella imborrable, visible en sus fornos de calcinación, que hoy son emblemas locales.

Pero A Pontenova es mucho más que hierro. Es el punto de partida de múltiples rutas senderistas, entre ellas la Vía Verde do Eo, que recorre antiguos trazados ferroviarios entre túneles, puentes y vistas de postal. Además, el río Eo —Reserva de la Biosfera— ofrece espacios perfectos para la pesca, el piragüismo o simplemente disfrutar del entorno.

Las 3 paradas que no puedes dejar de hacer si visitas Pontenova

Fornos de A Pontenova

Fornos de A Pontenova

Cinco enormes hornos de calcinación de mineral de hierro, declarados Bien de Interés Cultural. Impresionantes de día y aún más de noche, iluminados.

Vía verde do Eo

Vía Verde do Eo

Ruta de senderismo y cicloturismo de casi 12 km. Atraviesa túneles, antiguos apeaderos y ofrece vistas al río Eo.

Ruta das Minas

Ruta das Minas

La Ruta de las Minas en A Pontenova recorre antiguas galerías, hornos y vías férreas utilizadas para el transporte de hierro.

Descubre todo sobre Pontenova


Historia

A Pontenova nació como villa industrial a finales del siglo XIX, con la explotación de los yacimientos de hierro en la zona. La empresa «The Vilaodriz Iron Ore Company» fundó aquí uno de los complejos mineros más importantes del norte peninsular.

Los hornos de calcinación, el ferrocarril minero y la arquitectura de la época definieron el desarrollo urbano. La vida giraba en torno a las minas, que trajeron progreso, trabajo y también una nueva identidad.

Con el cierre de la actividad minera en el siglo XX, A Pontenova se reinventó, poniendo en valor su legado industrial y su espectacular entorno natural.

Leyendas

Cuentan que en los túneles antiguos de la vía minera aún se escuchan los ecos de los mineros. En noches de niebla, algunos vecinos aseguran ver luces que se mueven solas o escuchar picos contra la roca.

También se habla de “lendas do Eo”, como la de un espíritu que protege el río y castiga a quien lo contamina. Las leyendas, muchas de origen oral, se mezclan con la realidad de un pueblo donde el hierro, el agua y el bosque conviven.

Gastronomía

La cocina de A Pontenova es fiel reflejo de su entorno: ríos, montes y tradición. Su producto estrella es la trucha del Eo, cocinada a la gallega, frita o en empanada.

Otros platos destacados son la caza de temporada (jabalí, corzo) y las carnes de ternera gallega. En otoño, las jornadas de setas son muy populares. Para el postre, no faltan las filloas, quesos artesanos y dulces caseros.

Varios restaurantes del pueblo ofrecen menús caseros con productos de cercanía y recetas heredadas de generación en generación.

Qué ver cerca de Pontenova

Ribadeo

Ribadeo

A 35 km. Ciudad costera con el espectacular mirador de la ría y la famosa Playa de las Catedrales cerca.

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Foz es una villa marinera de la Mariña lucense, famosa por sus playas, su gastronomía y su rico patrimonio histórico junto al Cantábrico.

Vilalba

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Vilalba es la capital de A Terra Chá, conocida por su torre medieval y su rica tradición literaria gallega.