A Ponte Vella de Ourense es uno de los puentes más antiguos y emblemáticos de Galicia. Cruza el Miño uniendo historia, arquitectura y paisajes inolvidables.
Una forma de cruzar el Miño con historia.
A Ponte Vella no es solo una obra arquitectónica: es un testimonio vivo del pasado romano y medieval de Galicia. Caminar por sus piedras centenarias es revivir siglos de historia. Además, la vista panorámica del río Miño desde su altura es una experiencia inolvidable. Por si fuera poco, se encuentra en pleno corazón de Ourense, muy cerca de las famosas termas, lo que permite disfrutar de un paseo cultural seguido de relax termal. Sin duda, es una parada imprescindible para quienes desean conocer la esencia gallega.
Que ver en A Ponte Vella de Ourense
El puente en sí
Construido sobre cimientos romanos y reconstruido en el medievo, el puente impresiona por su arco principal de 43 metros. Con casi 400 metros de longitud, su silueta de piedra resalta sobre el paisaje urbano. Su uso peatonal permite explorarlo con calma, observando cada detalle y disfrutando del entorno natural del río.
El entorno fluvial del río Miño
Bajo el puente, el Miño fluye entre senderos, parques y zonas verdes. Es ideal para paseos tranquilos, practicar deporte o simplemente sentarse a contemplar el paisaje. Las rutas peatonales conectan con otros puntos de interés, como el Puente del Milenio o las termas de Outariz.
El casco histórico de Ourense
A pocos minutos del puente se encuentra el centro histórico, con joyas como la Catedral de San Martiño, la Plaza Mayor y el Claustro de San Francisco. Desde A Ponte Vella puedes iniciar una ruta cultural para descubrir la arquitectura, gastronomía y vida local de la ciudad.
