
Oza-Cesuras, en el corazón de Galicia, combina paisajes rurales, historia milenaria y tradición. Ideal para una escapada tranquila, con encanto gallego auténtico.
Por qué visitar Oza-Cesuras
Oza-Cesuras es un lugar donde el tiempo parece detenerse. Su entorno natural ofrece rutas entre bosques y ríos, perfecto para senderistas y amantes del aire libre. Además, es un excelente destino para quienes buscan conectar con la Galicia más auténtica, sin las aglomeraciones del turismo masivo.
Pasear por sus parroquias es descubrir iglesias románicas, fuentes escondidas y antiguas casas de piedra. La hospitalidad de sus vecinos y su ritmo pausado hacen que cada visita sea una experiencia humana y cercana. Además, su ubicación estratégica entre Betanzos y Curtis lo convierte en una parada ideal para explorar la provincia de A Coruña.
Las 3 paradas que no puedes dejar de hacer si visitas Oza-Cesuras

Iglesia de San Nicolás de Cines
Monumento nacional desde 1931, este templo románico del siglo XII es uno de los ejemplos mejor conservados de su estilo en Galicia.

Fervenzas da Rexidoira
Las Fervenzas da Rexidoira son un conjunto de pequeñas cascadas escondidas entre frondosos bosques. Un rincón natural ideal para desconectar y disfrutar del silencio gallego.

Ruta del río Mendo
Un sendero tranquilo junto al río que atraviesa molinos, bosques y pequeñas aldeas. Perfecto para desconectar y respirar naturaleza.
Descubre todo sobre Oza-Cesuras
Historia
Oza-Cesuras tiene raíces profundas que se remontan a la Edad Media. Formado tras la unión de los antiguos municipios de Oza dos Ríos y Cesuras en 2013, su territorio ya era importante desde tiempos del Reino de Galicia. Aquí se establecieron monasterios, como el de Cines, que jugaron un papel clave en la cristianización y la organización del territorio.
El lugar fue también una zona de paso entre las rutas interiores del norte de Galicia, algo que ha dejado huella en sus caminos, iglesias y puentes medievales.
Leyendas
Una de las leyendas más conocidas habla de una campana escondida en el bosque cerca de la antigua iglesia de Cesuras. Dicen que sólo repica en las noches de tormenta y que protege a los vecinos del mal. También circulan historias de «mouros» (criaturas míticas gallegas) que habrían dejado tesoros enterrados bajo algunos castros de la zona.
Gastronomía
La cocina de Oza-Cesuras está marcada por la tradición. El lacón con grelos es uno de los platos más representativos, servido con patatas cocidas y chorizo. En otoño, las setas silvestres y las castañas son protagonistas en muchas casas.
Los postres caseros como la bica o las filloas no faltan en las celebraciones locales. Y para acompañar, nada mejor que un vino de la comarca o una taza de licor café artesanal.
Qué ver cerca de Oza-Cesuras

Betanzos
A solo 20 minutos, esta villa medieval ofrece arquitectura señorial, tapas tradicionales y fiestas como la del Globo.

Fragas do Eume
Uno de los bosques atlánticos mejor conservados de Europa, con rutas de senderismo mágicas y el monasterio de Caaveiro.

Curtis
Conocido por sus paisajes rurales y la figura del escritor Manuel María, cuenta con una casa-museo dedicada a su obra.











