

El Castro de Viladonga, en Lugo, es uno de los yacimientos arqueológicos más importantes de Galicia.
Se trata de un antiguo poblado fortificado que muestra cómo vivían los castrexos entre los siglos II y V d.C. Su excelente estado de conservación permite recorrer sus murallas, viviendas y estructuras defensivas, ofreciendo una visión única de la historia gallega.
Castro de Viladonga: Un Viaje a la Galicia Castrexa
Este castro fue habitado durante la época romana, cuando Galicia vivió una profunda transformación cultural. Descubierto en el siglo XX, ha sido objeto de excavaciones continuas, revelando cerámica, herramientas y joyas que muestran la vida cotidiana de sus antiguos pobladores.
Que ver cerca en el Castro de Viladonga

Murallas y fosos
Estructuras defensivas que protegían el castro de posibles ataques.

Viviendas circulares
Construcciones típicas de la cultura castrexa, algunas con restos de hogares y herramientas.

Museo del Castro
Espacio donde se exhiben los hallazgos arqueológicos, con paneles explicativos sobre la historia del castro.
Historia y leyenda del castro
El Castro de Viladonga, situado en la provincia de Lugo, es uno de los yacimientos arqueológicos más importantes de Galicia. Su historia se remonta a los siglos II-IV d.C., en plena época romana, aunque su origen celta es aún más antiguo. Este castro destaca por su impresionante sistema defensivo de murallas y fosos, que protegían un poblado próspero dedicado a la agricultura y el comercio.
Una de las leyendas más populares cuenta que el castro estaba habitado por un poderoso jefe celta, que custodiaba un tesoro enterrado bajo la tierra. Según la tradición, este tesoro está protegido por fuerzas mágicas y solo podrá ser desenterrado por alguien de alma pura. Algunos lugareños afirman que, en noches de luna llena, se pueden escuchar susurros y ecos provenientes del pasado, como si los antiguos habitantes del castro siguieran vigilando el lugar.












